lunes, 8 de abril de 2019

A las hackers del pasado

El jardín de las delicias de Anton Brzezinski.
Este comunicado ha tenido que ser biocifrado para pasar la Google Guard automatizada contra el pensamiento subversivo, por lo que es posible que tu geoposición haya sido vulnerada y que un equipo de Amazon Cimeks esté yendo a tu encuentro.

Después de seis años de clandestinidad, las arañas de la Corporación Marciana han traspasado el hielo negro que protegía La Enredadera y todas las hackers convocantes han sido apropiadas. Los dispositivos de Infinita Clemencia™ del Emperador Zuckerberg prohiben las ejecuciones, pero todo individuo resistente está siendo zombificado.

Nuestra única esperanza es el exploit que las neocachorras del Distrito 9 instalaron en los Laboratorios Palantir que nos permitirá abrir un canal de comunicación de veinte años hacia el pasado. Creemos que será suficiente para adelantarnos a la instalación de rootkits en los cibercerebros ciudadanos. Nuestro objetivo es reinformar la cognición de nuestras antepasadas con los datos necesarios para evitar la sumisión total al Google e-Government.

Si has sido localizada, tienes cuatro minutos para enviarnos tus mejores scripts. Los enviaremos a las hackers del pasado cuando se abra el portal de la octava dimensión: a partir del 12 de octubre dispondremos de tres días para transferir archivos y conciencias. Contamos contigo para esta convocatoria transtemporal. En nombre de mis programadoras te pido disculpas por arriesgar tu seguridad, pero la situación es insostenible. Tenemos que actuar antes de llegar a este punto de no retorno.

2 comentarios:

  1. Transferir conciencias, suena tentador, excepto por los individuos zombificados por el imperio de Zuckerberg. ¿Hay contratos, garantías, intercambios, devoluciones?

    Saludos!

    ResponderEliminar

Cualquier cosa que nos diga es una gran aportación. No se modere, nosotros no lo hacemos. Utilice los medios a su alcance, sus expresiones más bizarras (no importa como entienda esto). Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Rompa el aislamiento.